La corrupción rodea a Keiko
Su padre y también su suegro fueron condenados por ese delito
La historia sobre el prontuario del suegro de la candidata Fujimori recién se conoció esta semana. La propia Keiko tiene abierta en la fiscalía una investigación por el desvío de más de 900 mil dólares del Tesoro público.
Por Carlos Noriega
Keiko se presenta como el rostro nuevo del fujimorismo.
Desde Lima
Joseph Francis Villanella fue condenado en Nueva York a tres años de libertad vigilada luego que se declarara culpable de evadir impuestos al fisco norteamericano por 244.400 dólares. Dos hermanos de Joseph Villanella también fueron condenados por el mismo cargo. El desfalco tributario fue perpetrado por un negocio familiar de los Villanella dedicado a la composición gráfica. El año 2009, el esposo de Keiko, a quien no se le conoce un trabajo, adoptó la nacionalidad peruana, pero en el trámite ocultó, inexplicablemente, la información sobre la identidad de sus padres, lo que ahora se interpreta como una decisión para evitar que se pueda rastrear el cuestionado pasado de su familia.
Keiko Fujimori, la candidata con un padre preso por corrupción y crímenes de lesa humanidad y con un suegro con antecedentes penales por evadir impuestos, quedó descolocada ante la revelación. Primero intentó eludir dar explicaciones hablando de “guerra sucia” en su contra y luego ensayó una explicación que sonó delirante: “Esto es una cortina de humo para ocultar los nexos de Humala y su esposa con Hugo Chávez”.
Mark Villanella, el esposo de la candidata, se presentó ante la prensa y cuando todos esperaban una explicación, leyó un comunicado y no respondió preguntas. Villanella, que apareció flanqueado por dos dirigentes del fujimorismo, admitió la veracidad de la denuncia, pero intentó restarle importancia definiendo la evasión tributaria por la que su padre fue condenado como una “falta administrativa”, lo que no coincide de la realidad.
“Vemos un denominador común en los padres de esta pareja (los esposos Keiko Fujimori y Mark Villanella): los padres de ambos son ladrones. Uno en Estados Unidos, porque el señor es norteamericano, y el otro en el Perú”, disparó Ollanta Humala, rival de Fujimori en la elección presidencial del 5 de junio.
La revelación de que el suegro norteamericano de Keiko Fujimori fue condenado en su país por evadir impuestos, se suma a los graves antecedentes de corrupción que rodean a la candidata del fujimorismo. Su padre, Alberto Fujimori, tiene dos sentencias por corrupción, además de una por violaciones a los derechos humanos. Está condenado a 25 años de prisión. Se estima que entre 1990 y 2000 el gobierno autoritario de Fujimori desfalcó fondos públicos por aproximadamente seis mil millones de dólares. Esto convierte al padre de Keiko, según la organización Transparencia Internacional, en el séptimo presidente más corrupto del mundo. Además de su padre preso, otros miembros de la familia de Keiko también están involucrados en actos de corrupción. Su tía Rosa, hermana de su padre, y el esposo de ésta, Víctor Aritomi, se encuentran prófugos acusados de robar el dinero de donaciones entregadas por el Japón para los niños pobres del Perú durante el régimen de Alberto Fujimori, descendiente de japoneses. Hay 78 ex funcionarios del régimen fujimorista que han sido procesados y condenados por corrupción o violaciones a los derechos humanos.
Pero la corrupción no solamente envuelve a su padre, a sus tíos, a su suegro y a los dirigentes de su partido, sino que la propia Keiko Fujimori, que en estas elecciones pretende presentarse como el rostro nuevo del fujimorismo, tiene abierta en la fiscalía una investigación por el desvío a su favor de más de 900 mil dólares del Tesoro público, que ella y sus tres hermanos utilizaron para vivir y estudiar en Estados Unidos durante el régimen de su padre. La de los Fujimori es una historia que va de la mano con la corrupción.
Página12
No hay comentarios:
Publicar un comentario